

Según relatos del fotógrafo y reportes de medios como La Nación y Tiempo Argentino, Caputo reaccionó tapando el lente de la cámara, tomó la credencial de Becerra, la fotografió con su celular y le dijo: "Vos sos un desubicado". El gesto fue ampliamente interpretado como intimidatorio.
El episodio generó repudio de entidades periodísticas como FOPEA, SiPreBA y Argra, que exigieron libertad para ejercer el oficio sin amenazas, destacando que figuras públicas como Caputo están sujetas a mayor escrutinio. El diputado Facundo Manes incorporó el hecho a una denuncia previa contra Caputo por un cruce en el Congreso, argumentando un "patrón de amenaza coactiva". Sin embargo, Becerra no planea presentar una denuncia, y el gobierno, a través de Manuel Adorni, minimizó el incidente, afirmando que Caputo solo quería "ver si había salido bien en la foto", una explicación que muchos consideraron insólita.
El hecho, capturado en video y fotos, se viralizó en redes sociales, donde usuarios y figuras políticas expresaron solidaridad con Becerra, comparando el gesto de Caputo con actitudes mafiosas y recordando casos históricos como el asesinato de José Luis Cabezas. La credencial de Becerra, que Caputo fotografió, llevaba en su reverso una imagen de Cabezas, lo que añadió un simbolismo inquietante al incidente.
Este episodio se suma a otros momentos polémicos de Caputo, como su enfrentamiento con Manes en el Congreso o la interrupción de una entrevista de Milei. Su actitud refleja una postura hostil hacia la prensa, en línea con declaraciones de Milei que han fomentado un clima de tensión con los medios. Aunque Caputo no tiene un cargo formal, su influencia en el gobierno es innegable, lo que amplifica la gravedad de sus acciones hacia un trabajador de prensa cumpliendo su labor.