

Contexto del Conflicto
El conflicto se inició tras un ataque terrorista el 22 de abril en Pahalgam, Cachemira, que mató a 26 civiles, mayormente turistas indios. India lanzó la Operación Sindoor el 7 de mayo, atacando supuesta infraestructura terrorista en Cachemira administrada por Pakistán. Pakistán afirmó haber derribado cinco aviones indios, incluyendo tres Rafale, un Su-30MKI y un MiG-29, usando cazas J-10C equipados con misiles PL-15E. India no ha confirmado oficialmente estas pérdidas, lo que genera dudas sobre la veracidad de las afirmaciones.
Rendimiento de las Armas Chinas
J-10C y PL-15E: Según CNN y Bloomberg, el J-10C, fabricado por AVIC Chengdu, demostró superioridad al derribar aviones indios. El misil PL-15E, con un alcance de 145 km y velocidad Mach 5, superó a los misiles MICA (60-80 km) de los Rafale, que estaban configurados para ataques terrestres, no para combate aéreo, según El Confidencial. Esto dio a Pakistán una ventaja táctica significativa.
Impacto en la Industria China: El éxito percibido impulsó las acciones de AVIC Chengdu en un 40% esa semana, según CNN. Analistas citados por Reuters y The New York Times señalan que el conflicto permitió a China recolectar datos valiosos sobre el desempeño de sus armas en combate real, algo que interesa a mercados como Oriente Medio y África, donde China busca expandirse frente a la disminución de influencia rusa tras la guerra en Ucrania.
Perspectiva Crítica
Aunque France 24 y otros medios destacan el "rendimiento excepcional" de las armas chinas, hay razones para cuestionar la narrativa:
Falta de Confirmación: India no ha admitido oficialmente la pérdida de aviones, y algunos reportes, como los de Israel Noticias, señalan que imágenes de supuestos derribos fueron desmentidas como accidentes anteriores. Esto sugiere una posible guerra informativa donde Pakistán podría estar exagerando sus logros.
Contexto Táctico: Los Rafale indios podrían haber sido vulnerables debido a configuraciones específicas para ataques terrestres, no a fallas inherentes del avión. El Rafale ha demostrado eficacia en conflictos como Libia y Siria, lo que pone en duda que su derrota sea un indicador definitivo de inferioridad frente al J-10C.
Intereses Chinos: China tiene un incentivo para promover la narrativa de superioridad de sus armas, especialmente tras invertir miles de millones en tecnología militar. El alza en las acciones de AVIC y el interés de otros países en sus sistemas, como señala CNN, podrían estar influidos por propaganda más que por hechos objetivos.
Conclusión
France 24 y otros medios reportan que las armas chinas, especialmente el J-10C y el PL-15E, tuvieron un desempeño destacado en el conflicto indo-pakistaní, superando a los Rafale y Su-30MKI indios. Sin embargo, la falta de confirmación oficial por parte de India, la posibilidad de desinformación y las circunstancias tácticas específicas del combate sugieren que estas afirmaciones deben tomarse con cautela. El conflicto ha beneficiado a China al demostrar el potencial de sus armas en un escenario real, pero no necesariamente prueba una superioridad absoluta sobre tecnologías occidentales.