

Villarruel y Bullrich representan la verdadera esencia del supuesto partido libertario: un rejunte de oportunistas sin convicciones, dispuestas a cualquier cosa por una cuota de poder. Bullrich, que pasó de empuñar las armas en la guerrilla a reciclarse en la Alianza, luego en el… pic.twitter.com/Q3yiaLwmN7
— César Milani (@GeneralMilani) July 11, 2025
Milani en X
·Villarruel y Bullrich representan la verdadera esencia del supuesto partido libertario: un rejunte de oportunistas sin convicciones, dispuestas a cualquier cosa por una cuota de poder. Bullrich, que pasó de empuñar las armas en la guerrilla a reciclarse en la Alianza, luego en el PRO y ahora en las filas libertarias, no tiene otra patria que el dinero. Hoy se enriquece desde el Ministerio de Seguridad, su único interés real, mientras vende discurso de orden a una sociedad desesperada. Su trayectoria es la de una acomodaticia serial que se disfraza según sople el viento del poder. Villarruel, en cambio, se viste de nacionalista pero solo repite frases vacías. Habla de patria mientras integra un gobierno que la desmantela: achica el Estado, destruye la industria nacional y entrega recursos estratégicos sin pudor. No defiende a la Nación, la entrega por partes. Ambas son dos caras del mismo cinismo: no tienen ideología ni proyecto de país, solo ambición personal. Serán olvidadas por la historia, porque no dejan más que la huella de su mezquindad.