

View from 🇮🇩Indonesian Maritime Patrol Aircraft of UK Carrier Strike Group and Indonesian warships in the Banda Sea yesterday. #CSG25
— Navy Lookout (@NavyLookout) August 1, 2025
H/T @Jatosint Via @_TNIAL_ pic.twitter.com/DFb9HhIeL0
se ha reportado la presencia conjunta del Grupo de Ataque de Portaaviones del Reino Unido (UKCSG) y buques de guerra indonesios en el Mar de Banda, una región estratégica en el Indo-Pacífico. El HMS Prince of Wales, portaaviones insignia de la Royal Navy, lidera el UKCSG, acompañado por el destructor HMS Dauntless, la fragata HMS Richmond y el buque logístico RFA Tidespring, con la posible integración de la fragata canadiense HMCS Ville de Quebec. Esta operación, parte de la misión CSG25, incluye ejercicios combinados con la Marina de Indonesia (TNI-AL), destacando la participación de la fragata KRI Raden Eddy Martadinata y un avión de patrulla marítima CN-235, según información reciente.Los ejercicios, descritos como maniobras básicas y pruebas de comunicación (PASSEX), tuvieron lugar el 31 de julio al suroeste de la isla de Buru, Maluku, como parte de la operación Highmast 2025, que busca fortalecer la capacidad operativa del UKCSG y la interoperabilidad con aliados del Indo-Pacífico. Esta colaboración marca un hito en la relación naval entre Reino Unido e Indonesia, reflejando un esfuerzo por contrarrestar la creciente influencia china en la región, aunque las intenciones oficiales se centran en la seguridad marítima y la estabilidad regional.Sin embargo, la narrativa oficial debe tomarse con escepticismo. La presencia del UKCSG, con su ala aérea de F-35B y capacidad de proyección de fuerza, podría interpretarse como una demostración de poder frente a tensiones geopolíticas, especialmente tras la cumbre de los BRICS y las actividades chinas en el Mar del Sur de China. Publicaciones en X sugieren un interés local por monitorear estos movimientos, con aviones indonesios capturando imágenes del grupo, pero la falta de datos independientes y la posibilidad de agendas ocultas —como ejercicios de contención o preparación para conflictos— dejan el propósito real en duda. Hasta que se publiquen reportes oficiales detallados, esta colaboración naval permanece como un ejercicio de cooperación con implicaciones estratégicas inciertas.